Salón del Automóvil de Frankfurt: Hyundai Genesis Coupé

Redacción (Frankfurt).-El potencial de los fabricantes coreanos poco a poco va asentándose en un mercado tan exigente como el europeo.

En el caso de Hyundai, su apuesta por la producción de modelos deportivos no es nueva y, de hecho, el primer Coupe FX que se vendió en nuestro país tuvo un éxito que sorprendió a propios y extraños.

Con la siguiente generación, Hyundai creó un producto pensado para un público más selecto e incluyó en la gama un motor 2.7 V6 que elevaba sensiblemente su caché. Ahora, sin embargo, el Genesis Coupe presenta unas condiciones que lo sitúan por encima de muchos deportivos europeos. Por ese motivo, Hyundai llega a Frankfurt con la intención de evaluar la reacción del gran público, y decidir así su comercialización en el Viejo Continente.

Empezando por los propulsores, el Lambda RS DOHC V6 de 3,8 litros envía al eje trasero la nada despreciable cifra de 303 CV de potenciaa 6.300 rpm, capaces de lanzar a este dinámico modelo de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos.

Este atmosférico deriva del Lambda V6 ya conocido en la marca. Está construido totalmente en aluminio e incorpora distribución variable Dual CVVT, que actúa sobre las válvulas de admisión y escape.

Para asegurar la fiabilidad mecánica, el bloque se ha reforzado y se ha añadido un sistema de enfriamiento de los pistones debajo de cada cilindro que reduce la carga térmica.

Para el que no necesite unas prestaciones tan extremas, el Hyundai Genesis Coupe dispone de un motor que no desentona con su talante deportivo. Se trata del Theta 2.0, un tetracilíndrico turboalimentado de 210 CV que, como su hermano mayor, cuenta con distribución Dual CVVT y enfriamiento de los pistones. Su 0 a 100 km/h, en 8,3 segundos, deberían permitir una conducción igualmente dinámica.

La transmisión se confía a un cambio manual o bien a un ZF automático, ambos de 6 velocidades, que conectan el motor con las ruedas traseras a través de un diferencial autoblocante con sensor de par.

La suspensión, por su parte, se confía a un McPherson delantero y a un multibrazo trasero, mientras que los amortiguadores cuentan con cámaras independientes de aceite y gas. De la frenada se encarga un equipo firmado por Brembo, con pinzas fijas de cuatro pistones y discos de 340 mm de diámetro delante y 330 mm detrás.

La batalla de 2.820 mm permite augurar un comportamiento asentado en curva rápida, mientras que la carrocería de 4.630 mm le coloca a la altura de modelos consagrados como los coupés de la Serie 3 de BMW o el Audi A5, en los que se dispensa un trato privilegiado a los ocupantes traseros, teniendo en cuenta las formas de sus carrocerías.

El equipamiento de seguridad cuenta con elementos como ESP, seis airbags y reposacabezas, mientras que accesorios como los conectores USB, pantalla de 5,6 pulgadas o mandos en el volante forman parte de la dotación de serie, que se puede completar con un sistema de sonido Infinity con seis altavoces.