Mazda mejora el CX-7

mazda-mejora-cx-7-12634555652046.jpg

©Mazda

Ginebra (Suiza).- El diseño exterior continúa comunicando una identidad Premium. La nueva parrilla de cinco puntas, marca de la casa, se emplea para mejorar la refrigeración del motor. La parrilla inferior, en la versión Luxury, está cromada y junto a los nuevos biseles de las luces antiniebla delanteras intenta dar una imagen de mayor calidad. Para remarcar la silueta deportiva del vehículo se ha cromado la parte inferior de las puertas. Las llantas pasan a ser de 18″, a excepción de la terminación Luxury, que cuenta con unas de 19″.

En la parte trasera se ha modificado el diseño del paragolpes con una moldura nueva y un alerón de mayor tamaño. La gama de colores aumenta hasta siete, tres de ellos nuevos, Aluminium Metallic, Stormy Blue Mica y Sparking Black Mica.

mazda-mejora-cx-7-12634555652048.jpg

©Mazda

Pero la búsqueda de una imagen de mayor calidad no se queda en el exterior. En el interior se han sustituido gran cantidad de materiales por otros de mejor calidad. El volante es de nuevo diseño y permite observar el nuevo cuadro de mandos con luz indirecta azul, agujas blancas y relojes tridimensionales.

El nuevo salpicadero tiene un doble voladizo y lleva una pantalla multifunción integrada. En el acabado Luxury tiene pequeños detalles cromados, para darle una imagen más sofisticada. El material de los reposabrazos se ha sustituido por otro más mullido.

La pantalla situada en la consola, le proporciona información al conductor, datos de navegación y una cámara de visión trasera. El sistema de navegación se encuentra como opción con pantalla táctil de cristal líquido de 4,1 pulgadas. El sistema de sonido tiene compatibilidad Bluetooth, permitiéndonos oír equipos de música externos que también tengan este sistema.

mazda-mejora-cx-7-12634555652043.jpg

©Mazda

Pero la principal novedad del renovado CX-7 está en el motor. El nuevo 2.2 litros diesel que presenta la marca japonesa tiene 173 CV a 3.500 rpm y un par máximo de 400 Nm a 2.000 rpm. Supera la normativa Euro5 y consume una media de 7,5 litros de gasoil a los 100. Con esta mecánica el Mazda acelera de 0 a 100 en 11,3 segundos y alcanza una velocidad punta de 200 Km/h. Como alternativa al diesel se encuentra el ya conocido motor de gasolina de 2.3 litros DISI con turbocompresor. Desarrolla 260 CV a 5.500 rpm y un par máximo de 380 Nm a 3.000 rpm. Consume 10,3 litros a los 100, tiene una velocidad punta de 210 Km/h y acelera de 0-100 en 8 segundos. Cuenta con el nuevo catalizador de Mazda que reduce el empleo de metales preciosos en su fabricación. Ambos motores van acompañados de una caja de cambios manual de seis velocidades.

Para hacer un poco más divertido el coche, la rigidez del chasis se ha incrementado en un 5% y se han introducido uniones soldadas en algunos de los nuevos refuerzos de la carrocería. La suspensión delantera es de tipo MacPherson y la suspensión trasera es multibrazo. Los amortiguadores son más suaves para mejorar el confort. El sistema de tracción total continúa siendo el AWD heredado de la anterior versión.

La seguridad también se ha mejorado. El control de cambio de carril y el sistema de parada de emergencia, que enciende las warning cuando se frena bruscamente, están presentes de serie en toda la gama.

Sé el primero en comentar